Mente fría. Ese es el truco. Ese es la mejor actitud para tomar decisiones, para saber que hacer en el momento adecuado. Pensar con claridad y tomar las riendas con mucha fuerza. Dejar a un lado los sentimientos y elegir las palabras adecuadas que hagan que tu cerebro se active y aleje todos los miedos que ahora mismo te abruman. Y si yo tengo que decidir por ti, así lo haré. Si alguien tiene que guardar la calma, y hacerte ver que todo va a salir bien, yo seré tu tranquilidad y la que te haga ver que se puede con esto y mucho más. Porque es de débiles rendirse, y es de fuertes afrontar cualquier obstáculo que se encuentre en nuestro camino. Porque caerse es posible, pero levantarse es una obligación. Porque la palabra 'rendirse' jamás estará en mi vocabulario, y por supuesto, nunca permitiré que en el tuyo lo esté.
Removería cielo y tierra por ti. Y todo lo que hiciese falta.
Nunca lo dudes.
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