Suena de nuevo esa canción. Mi canción. La he escuchado mil y una veces pero jamás me he cansado de ella. Sigue teniendo el mismo sentido para mi que siempre. Y en determinados momentos me ayuda a sonreír, a creer que todo aquello que me proponga es posible.
Llevo meses con una preocupación constante. Y ahora estoy aquí, contigo. Siempre con múltiples razones. Una principal y otras muchas que hacen que siempre me mueva en el mismo sentido. Soy incapaz de hablarte de ciertos temas y no por vergüenza. Tan solo hay un motivo. Es tan difícil para mi como para ti.
La canción aún no ha llegado a su fin y no puedo dejar de observarte. Es entonces cuando me dices que esa canción siempre te ha gustado. Te hablo del significado de su letra y me haces consciente de que ese es el motivo por el cual te gusta tanto: todos tenemos siempre algo que dar de nosotros mismos, y sacaremos fuerzas de donde sea necesario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario